27 de noviembre de 2007

Los pingüinos viven cada vez mas hacinados mientras sus pequeños mundos flotantes van menguando. Se creen Alicia, cada vez mas grandes. Están tan equivocados...
Los esquimales harán remos de sus trineos y darán la vuelta a sus iglús para poder ir a cenar a casa de los vecinos. Remarán sobre recuerdos de suelo inconstante.
Venecia será la nueva Atlántida y hasta quizá aprenda a pescar desde mi terraza.

El hielo polar se deshace.

(aunque a veces pienso que sencillamente se traslada a las miradas de la gente de la ciudad, y eso me alivia)

4 formas de verlo:

Anónimo dijo...

Si Ernest Shackleton levantara la cabeza...
(El hielo en general - la Antártida en particular - es una de mis mayores fascinaciones).
(Y los perritos ¡Guau!)

Ganas de convertirse en iceberg y reventar transatlánticos...
Ejem.
:-/

G. dijo...

y en la ciudad cada vez más hacinados, pronto sólo usaremos ropa de verano o tendremos q vivir de noche para q los ultravioletas no nos dañen. El desierto llega a nosotros y no hacemos nada por evitarlo, quizá nunca volvamos a ver nevar en Madrid...

Carmen Griss dijo...

Ostras, ahora que lo pienso, en cierta manera está bien... asi los asesinos de focas lo tendrán mucho mas dificil para cazarlas, seguro que en el agua les cuesta mucho mas atizarles

Ripley dijo...

A veces nosotros también somos un poco pingüinos hacinados en las ciudades; unas ciudades que no mengüan en tamaño pero sí en habitabilidad y calidad de vida. bonito post.