26 de septiembre de 2007

¡era eso!

...creo que ya lo se, estoy segura que lo que hace que últimamente sienta con tanta fuerza que me estoy convirtiendo en una persona mayor es el hecho de tener que solucionar los problemas de mi madre. Curiosa sensación.
Quizá mientras crecemos -y así aprendemos todas las cosas- la balanza cae claramente a favor de las experiencias gratificantes, ni que sea porque los buenos recuerdos casi siempre sobresalen de por entre los recuerdos desagradables.
La resignación y a la vez la resistencia a las experiencias desagradables es lo que me hace sentir el peso de miles de años sobre los hombros.

Siempre es bueno saber qué es lo que se padece.

3 formas de verlo:

Anónimo dijo...

hombros....quizas esa sea la palabra clave... habras descubierto que encima tienes la cabeza? .... cosas de la edad

marga dijo...

ahhh no sos la única que siente ese peso...

salu2

Anónimo dijo...

pues sí, es exactamente eso, tus padres no sólo ya no se ocupan de tí sino que te necesitan y la ilusión de independencia que caracteriza la juventud, desaparece. Bienvenida a la madurez