30 de octubre de 2006

El motivo

Ser tu manta de cuadritos marrones, tu infusión, calentarte los pies con las manos y mirarte mientras duermes. Sacar besos del sombrero y de la nevera justo el postre en que estas pensando. Emparrarme por tus pezones como una enredadera. Que cierres los ojos, inspires todo el aire que existe y que se rompa el cielo sobre tí.
Pensar en el porqué de estas cosas es tonto. Son tonterías pequeñas.
Solo hay un porqué:
Con cada gotita de cariño que te doy me muero de placer.

27 de octubre de 2006

Superhormiga

Hay quien dice que la ha visto sonreir entre la multitud enlatada por las mañanas, y asegura que es ella porque cuando sonríe, un destello dental de película ilumina todo el vagón.
Se sospecha que aprovecha el tumulto para ponerse la capa naranja y que aquella bici destartalada que duerme siempre en la calle atada a una farola delante de la comisaría se transforma en el Hormigamovil con la primera pedalada.
Superhormiga todavía no ha recuperado todos los puntos del carné de Superheroina, pero al menos lo intenta, pedaleando cuesta arriba con su capa naranja y su cazasonrisas. Se le perdona porque es a la vez la buena y la mala de la peli, y de vez en cuando aprieta demasiado los dientes y cierra fuerte los puños, sin conseguir sonreir.
Aún no ha rescatado el gato escalador de árboles de ninguna vieja ni ha dado su merecido a niños abusones que roban el bocata a las niñas tontas. Dadle tiempo, porque siempre que puede le pega una tunda a la malvada Superdesilusión y la obliga a regresar a las alcantarillas del alma.
Y cada vez que se acuerda de sus victorias, las echa a volar, con un destello dental de película que ilumina todo el vagón.

24 de octubre de 2006

Again and again...

Coche, tren, bici, trabajo nuevo, nuevos compañeros, otra vez, venga, va, otra vuelta a la noria, otro cubo mas de de agua, mas pesado, otra vez, que no se diga, Carmen, que no se diga de ti que no lo intentas again and again and again, tras años de cosechas pobres de pasión, en que te has tenido que comer todo lo recogido para sobrevivir, y no has podido guardar para sembrar casi nada... y no llueve... y los pantanos de amor se empobrecen, y bici, tren, coche, y a casa again and again and...

Quisiera ser un pez... pero no para bañarme en tu pecera, sino para carecer de memoria y sorprenderme hasta de mi careto aumentado en las paredes de vidrio, para olvidar y flipar, que todo sea nuevo a cada momento... como una Metamorfosis Kafkiana pero cutre...

19 de octubre de 2006

Desobedecerte

Sé perfectamente que no te gusta que hable de nosotras, supongo que es porque “nosotras” es una palabra que nos queda grande.
Lo siento, pero voy a desobedecerte.
Hay algunos momentos en que me amas tanto como yo a ti, y muchos otros en que lamentas no disponer de ninguna muestra de amores pasados para poder valorar hasta que punto me amas. Quizá es simplemente que cuando estamos juntas la vida es mullida y dulce.
A tu lado la vida tiene el grano y la luz de las películas de los años cuarenta, y todo parece importante: los besos de tornillo, las risas, las bofetadas, el viento que agita mi gabardina cuando marcho apresurada y algo triste de tu casa en atardeceres lluviosos...
Y me doy cuenta de que quizá yo tampoco te he amado nunca, porque esas cosas solo pasan a los diecisiete y después son solo espejismos.
Al fin y al cabo tampoco tiene demasiada importancia porque en ocasiones, pongo todos los misterios y las maravillas del mundo en mis manos y los hago estallar en tu cuerpo, y muy lejos de quedarme sin ellos, se me multiplican y te vuelven a buscar.
No lo llames amar: llámalo energía estática.

Me encanta desobedecerte.

18 de octubre de 2006

Vigilia

Solo tengo sueño por las mañanas. Por la noche podría seguir y seguir hasta dormirme en el sofá a las tantas. Ya ni me acuerdo de la última vez que dormí mas de seis horas seguidas... La doctora dice que es suficiente con eso, pero yo no puedo evitar sentirme como flotando, entre el mundo real y el onírico, cansada y atontada, pero sin sueño. Es una sensación extraña, como si tuviese avaricia por vivir conscientemente para no perderme nada, por si acaso sucede algo genial y me pilla durmiendo, cosa que no me perdonaría jamás.
No puedo dormir. Tengo que asistir a todos los acontecimientos, por pequeños que sean. Tengo que estar atenta. Como la limpiacristales de una nave espacial, que al menor movimiento brusco puede salir disparada hacia el vacío, perder las referencias y fundirse en negro.

15 de octubre de 2006

Poema número XX para Madrid

Sin parar... rodeada de gente genial desde el primer dia, caminado arriba y abajo, y esque tener casa en el centro hace que dé mucha pereza coger el metro, pero en el fondo también hay distancias en el corazón de Madrid. Mis pasos en la noche suenan a despedida.
Vine a visitarte para comprobar si lo nuestro tenía remedio, aún sabiendo que no, que a veces los caminos se bifurcan y ya nunca mas. Pero te he disfrutado como hacía años. Igual que una cría caminando por encima de sus propias huellas en la arena, pero hacia atrás, como se hace en la playa, te he recorrido y he recordado con claridad cuanto amaba cada una de tus esquinas.
Es cierto... como dijo Neruda... ya no te amo, pero tal vez te amo... Cielo gris de Madrid del que heredo el color de mi alma: tu y yo sabemos bien que es muy corto el amor, y muy muy muy largo el olvido.

11 de octubre de 2006

Momentos momentitos momentazos

Tan sencillo como explicarle batallitas y que se ría de mis neuras y mi verborrea a lo Woody Allen. Pasear un rato y que no se acaben las chorradas que decir ni las ganas de seguir.
Momentos momentitos momentazos que pasan a la historia, esa que esta hecha de tardes en que nada impide ser feliz un rato, en que siento un mordisco travieso en el alma que en lugar de dolor, me hace cosquillas.
Decidido: mi reino por un puñado de sonrisas.

8 de octubre de 2006

101

Este es el post que hace 101. Supongo que habría sido mas lógico celebrar el post número 100, pero bueno, cada una tiene sus pequeños misterios tontos para sentirse interesante.
Celebro más cosas:

Que la Reina de las Lagartas me prepara bocatas de felicidad para cenar y se las apaña para hacerme sentir importante. Mira que es maja.

Que cuando llueve y el día esta gris y tonto, aparecen los caracoles y le dan a la vida un punto de travesura.

Que eres una nube: cuando te tengo por encima todo es oscuro pero cuando consigo elevarme y atravesar tu corazón eres mullida y el sol es mas sol que nunca.

Y que, lejos de ser una vulgar mortal, he sabido que soy descendiente directa de
Prometeo.

6 de octubre de 2006

Conocerte How To

1.- Yo habré ido a comer al Ikea, porque tiene parking gratis, comida barata, se puede perder el tiempo marujeando después y no pareces una bicha rara por comer sola.

2.- Te veré entrar en la cola, desde lejos, y rápidamente mis mecanismos de depredación se activarán: la adrenalina acelerará mi corazón y enviará glucosa a los músculos (canijos) de mis piernas, que apretarán el paso para conseguir situarme justo detrás de ti.

3.- Llegaré a tiempo por los pelos, haciéndole un magnífico dríbling a toda una familia francesa al completo, y tú te darás cuenta de mi apresuramiento mientras cojo la bandeja, el pan, los cubiertos... Me mirarás y pensarás que Ikea esta lleno de bollos frikis pero simpáticas. ¡Bien!

4.- Nos miraremos por casualidad. Tú porque dudarás del primer plato que has escogido, mirando a tu izquierda, y yo porque ya estaré mirando a la derecha, dudando entre los postres y buscando por todas partes la etiqueta del precio que deberías tener en alguna parte. Supongo que de tenerla, debería estar en tu nuca, pero insisto en buscarla entre tus labios y tus tetas.

5.- Mientras yo me estaré autoconvenciendo de que eres gratis, tu me pillarás mirando. Ante tal vergüenza sonreiré, no diré ni pío y mis orejas se teñirán de púrpura.

6.- Abrirás la tapa de vidrio de la estantería de los postres y veré con horror que te lanzas hacia el que yo había escogido exactamente, el trozo más grande y con la bola de nata más gorda. Me apresuraré a alcanzarlo antes, y ¡oh casualidad! Se rozarán nuestras manos. Sonreirás ante mis desatinos. Sudaré frío. Habré sido descubierta.

7.- Como ya no tendrá remedio, también dejará de tener sentido disimular y te preguntaré si comes sola. Te haré una de mis disertaciones sobre lo chulo que es comer y charlar un rato y sobre lo cutre que es leer el "Metro" en la mesa. Te preguntaré si te importa que me siente contigo.

8.- Ojalá te guste el cine, los perros, comer bien, las canciones, mirar el paisaje, cualquier paisaje, que te traigan croissants los domingos por la mañana y sobre todo, que te encanten las lunáticas de peluche.

2 de octubre de 2006

Lo que es y lo que parece II

Cabalgando grácilmente por ahí con mi Seat Ibiza en busca de princesas que salvar, y andando más perdida que mi abuela en una NextTown, encontré a una nativa de la isla lagarto y ni corta ni perezosa le pregunté dónde encontrar torres con princesas prisioneras de lo que sea, o en su defecto, princesas sin torre ni nada.
Con la demoledora sabiduría de los lagartianos, me respondió en verso y sin dudar que no podía salvar a nadie hasta que no fuese libre yo.
Me dejó tan flipada que arranqué rápidamente con un chulesco trompo para evitar que alguien me viese hacer pucheros, di la vuelta y salí por patas de aquel lugar, camino otra vez del mar.
Pero el mar estaba tan lejos y yo tan perdida, que al caer la noche y sentir hambre, me tuve que comer el ramo de mariposas para cenar.
No he podido dormir desde entonces. Las tengo todas en el estómago.